1 Corintios 1:10 ¨...que habléis todos una misma cosa...¨
Ciertamente que los hermanos de la Iglesia de Corinto no estaban todos hablando lo mismo, sus diferencias las había llegado a exteriorizar tanto que muchos hermanos y hermanas, tenían a sus propios seguidores, ya que todos hablaban diferentes cosas, no tenían en común todas las cosas que Pablo les había enseñado.
El Apóstol Pablo llama a ¨obrar con conciencia de lo que el Señor es, de lo que representa y de lo que exige¨.
Es de hacer notar que el Apóstol Pablo comienza con una rogativa, a quienes? a sus hermanos en la fe, y lo hace no en su nombre sino en el nombre de nuestro Señor Jesucristo a que todos los hermanos hablen una misma cosa.
Ciertamente no todos los hermanos estaban hablando lo mismo, todos de alguna forma habían adquirido una manera diferente de hablar, de sentir e incluso hasta en su creer.
El Apóstol Pablo muy preocupado por lo que esta aconteciendo al cuerpo de Cristo
es decir a la iglesia, escribe esta carta, abordando el principal problema que enfrenta iglesia y lo hace como el primer problema en solventar para llevar a la iglesia nuevamente a la unidad en Cristo de la cual es necesario estar formados para no permitir que el enemigo tome ventaja sobre la iglesia.
Las divisiones de la iglesia no vienen de afuera, se fomentan y se le dan cabida desde adentro de la iglesia misma, y cuando ocurren, muchos hermanos quedan con su corazón lastimado, algunos miembros nuevos en la fe se vuelven al mundo y otros se alejan totalmente del Señor y de la iglesia.
Este primer problema que enfrenta la iglesia no deja ver los otros problemas que pudiera estar enfrentando la misma, tal es el caso que atrás de este problema hay nueve problemas más los cuales la iglesia tenía y en los cuales se habían dado cabida porque no todos tenían el mismo sentir y el mismo pensar.
Las divisiones son causales de malos testimonios, disciplinas, separaciones entre miembros de familias de sangre, la perdida de miembros que no se van con ninguna de las partes, sino que vuelven al mundo.
El Apóstol Pablo no pide que tengan en todo las mismas opiniones, sino que mantengan una unión en FE y AMOR suficientes para que no se formen partidos dentro de la iglesia.
Seguramente las contiendas habían originado malos testimonios para con los de afuera al grado de que es de suponer que cuando iban por la calle se identificaban como los seguidores de Apolo, o de Pablo, sea de Cefas o aquellos que se mantenían firmes siguiendo a Cristo.
Es de hacer notar que cuando una parte del cuerpo de Cristo es promotor de divisiones en la iglesia, olvida a Aquel que murió por el en la cruz del Calvario.
¿Esta usted causando o promoviendo división en su iglesia?
Recuerde que Jesús murió por sus pecados y nos llamó a estar en :
Un Señor, una fe, un bautismo...Efesios 4:5
Dios te bendiga
Armando Ríos
Llamado a servir y no ser servido.
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