1 Corintios 3:1-9
Colaboradores de Dios
1 De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo.
2 Os di a beber leche, y no vianda; porque aún no erais capaces, ni sois capaces todavía,
3 porque aún sois carnales; pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres?
4 Porque diciendo el uno: Yo ciertamente soy de Pablo; y el otro: Yo soy de Apolos, ¿no sois carnales?
5 ¿Qué, pues, es Pablo, y qué es Apolos? Servidores por medio de los cuales habéis creído; y eso según lo que a cada uno concedió el Señor.
6 Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios.
7 Así que ni el que planta es algo, ni el que riega, sino Dios, que da el crecimiento.
8 Y el que planta y el que riega son una misma cosa; aunque cada uno recibirá su recompensa conforme a su labor.
9 Porque nosotros somos colaboradores de Dios, y vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios.
Juntamente con los versos arriba expuestos no podemos dejar de mencionar lo que dice Dios en Hebreos 4:12
12 Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.
Una iglesia, puede tener 5, 20, 30 ó más años de existencia, pero su madurez espiritual no se mide por los años de existencia, sino por su comportamiento en tiempos de dificultad, persecución, angustia y tiempos de solaz.
La iglesia de Corinto es el vivo reflejo de lo que puede llegar a ser una iglesia con muchos o pocos años de fundación, ya que el apóstol Pablo les reprende, por: su profunda debilidad espiritual, carnalidad y sus divisiones.
Pudiéramos comenzar a analizar como una iglesia como la de Corintios había llegado a tal estado espiritual, que fue necesaria la intervención del apóstol Pablo para comenzar a corregir, sanear y encausar nuevamente a la iglesia en el camino correcto.
Lo primero que encontramos en estos versos es su debilidad espiritual, la cual se da muchas veces por el tipo de enseñanza que puede estarse predicando en la iglesia.
Lo segundo, es tan malo como el primero y es el consentimiento del o los líderes al permitir que en la iglesia haya división dejando a la feligresía a ¨seguir y fijar su mirada en ellos¨ cuando lo correcto es seguir a Jesucristo, y esto es precisamente lo que aconteció en la iglesia de Corintios.
Ciertamente muchas iglesias pueden dar muestras de su debilidad espiritual, aunque sean creyentes nacidos de nuevo, su crecimiento no esta de acorde o no es el debido, por el tiempo de predica o enseñanza que pudiera estar recibiendo.
Es duro leer las primeras palabras del apóstol Pablo de este capítulo 3:1…De manera que yo, no pude hablaros como a espirituales. . . muchos hoy en día nos pudiéramos creer espirituales, pero ante las adversidades damos muestra ser como la iglesia de Corintios, un debilidad que no nos enteramos que teníamos en lo más íntimo de nuestro corazón y que sale a luz en tiempos de conflictos, comportándonos como niños espirituales.
Si bien podemos tener las más elementales enseñanzas de la fe cristiana, no hemos aprendido a profundidad las mismas verdades para madurar espiritualmente, siendo como niños, necesitados de ¨leche espiritual¨ en vez del alimento sólido que es necesario para los momentos de conflictos. Asimismo expone el apóstol Pablo lo que continúa diciendo en el verso 2…no erais capaces ni lo sois todavía… es muy de lamentar que los hermanos de Corintios, aún y cuando pudieran tener algunos años de estar como iglesia, no habían crecido, especialmente sus LIDERES, el apóstol lo pone de manifiesto en el siguiente verso.
El deber del LIDER cristiano (ministros, pastores, maestros, maestras, evangelistas, etc.) es adaptarse a los oyentes, pero es también el deber de cada cristiano crecer en la gracia y el conocimiento pleno de nuestro señor Jesucristo. (2ª Pedro 3:18.)
No solamente llegamos al punto de la debilidad y la falta de madurez espiritual, sino que el apóstol Pablo, deja entrever un grave estado de la iglesia en general, verso 3. . .porque aún soy carnales…el apóstol, usa un adjetivo distinto al del verso 1 al calificar el estado de carnalidad, en el primero usa la palabra griega sarkínos de carne para expresar la debilidad espiritual de la iglesia, pero en este otro verso 3, utiliza el adjetivo griego sarkikós carnal para expresar el aspecto de pecaminosidad de toda la iglesia en general, es decir de los LIDERES en general, Cefas, Apolos y todos aquellos que estaban causando la división de la iglesia, debido al proceder de toda la iglesia, al grado de compararlos con los hombres del mundo, es decir con los impíos, los no regenerados por la sangre de Cristo.
Esto nos debe de llevar a la reflexión del comportamiento que pudieran tener algunos líderes de la iglesia evangélica actual sobre su comportamiento, al permitir que la iglesia se diluya, divida y cause malos testimonios por la falta de madurez espiritual o por la falta de sensatez de algunos que se han extraviado del camino de la fe, aunque continúen al frente de la iglesia., sus obras hablan por si mismos del nivel espiritual, y el apóstol Pablo los compara a HOMBRES MUNDANOS, IMPIOS Y DEPRAVADOS que tuercen el evangelio a conveniencia propia.
Si usted ahora esta pasando en momentos de dificultad y da muestras de debilidad, debe de escudriñar si es un niño (a) espiritual, o si solamente es un momento de debilidad y necesita dar muestras de su madurez espiritual, que los años que lleva siendo instruido (a) no han sido en vano,…pero si usted no demuestra madurez espiritual, es porque sigue siendo un niño (a) espiritual y no es posible darle alimento sólido.
Muchos ahora pueden estar dando muestra de una falta de madurez espiritual, no por ser inmaduros, sino porque su LIDER puede estar guiando a la iglesia a una división, como se daba en la iglesia de Corintios, tanto de parte de Apolos, como de Cefas y quizás muchos otros que el apóstol Pablo no menciona.
Dios le llama a reflexionar sobre el alimento que usted a estado tomando durante todos estos años, si es un alimento solido o continúa tomando leche espiritual y puede ser llevado – arrastrado fácilmente a apoyar divisiones en la iglesia, que lesionan dura y seriamente el cuerpo de Cristo, es decir SU iglesia que el compró con su sangre en la cruz del Calvario.
Recuerde que usted nada hizo para comprar la iglesia, es propiedad de Cristo y usted forma parte de ella.
Que Dios nos bendiga.
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